Ante la constante ofensiva conservadora y fascista del Partido Popular contra los derechos de las mujeres, desde IU manifestamos lo siguiente:
25 años tardó el PSOE en hacer una tímida reforma de la ley aborto, con la que defraudó a gran parte del movimiento feminista, por lo timorata y limitativa de la misma.
Pero llegó el PP y a través de su ministro de Justicia, sigue ahondando en propuestas que atentan contra la libertad de las mujeres y nos anuncia una restricción no sobre la última ley de aborto, sino sobre la anterior. Pretende utilizarnos a las mujeres como mercancía para congratularse con sus retrógradas bases sociales y con sus aliados estructurales, entre ellos la Iglesia. Además, se permite continuamente una intromisión ilegitima e insoportable en la vida de las mujeres, pretendiendo imponernos al conjunto de la sociedad sus principios morales, socavando el principio de aconfesional del Estado.
Sin duda la negligente y recatada actuación del PSOE, le habrá avalado al despótico gobierno del PP para modificar incluso los supuestos de la ley del 85, con la que gobernó y no enmendó el gobierno de Aznar durante 8 años.
Las mujeres, después de décadas de “democracia” seguimos siendo ciudadanas de segunda clase, donde derechos fundamentales, como el derecho a decidir sobre nuestra vida, siguen tutelados e incluso pueden ser aniquilados, y continúan siendo objeto de reproche penal.
Pero el actual Gobierno, ha decidido acabar con todo. Se sienten legitimados para arrasar con todo tipo de derechos económicos y sociales. El gobierno fascista de este país pretende a cuenta gotas ir dando los detalles de su pretendida modificación de la actual legislación sobre la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Ahora, con alevosía por el momento en que lo expresa, su Gallardón apunta que no será supuesto para abortar la inviabilidad, la deficiencia física o la enfermedad grave del feto, siendo aplaudido por la Iglesia y los grupos pro vida.
Desde Izquierda Unida no sólo nos oponemos a que se restrinjan más los maltrechos derechos de las mujeres, sino que además, apoyaremos al movimiento de mujeres y al feminista a salir a la calle para reivindicar la total autonomía de las mujeres en la toma de decisiones. No apoyaremos políticas paternalistas ni protectoras, reivindicamos políticas sociales públicas que reconozcan la libertad de las mujeres para decidir sobre su maternidad.
Tenemos que parar esta pretendida reforma, tenemos que parar el retroceso en derechos; tenemos que salir a la calle; tenemos que hacerles saber al Gobierno que nuestros derechos no son mercancía, que con ellos no se negocia; tenemos que dejarles claro que los derechos fundamentales no son recortables ni soslayables, los Estados sólo tienen una competencia: ahondar en ellos y garantizarlos.
Y sólo hay una respuesta posible, desde la contestación, desde la insumisión social, la rebelión de las mujeres contra un atentado “estructural” a nuestros derechos específicos y libertades propias.
Fuente http://www.izquierda-unida.es/node/11019Twittear
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